odio como me hablas y me miras sin recelo.
odio la manera en que me lees la mente.
te odio tanto que me haces rimar.
odio que tengas razón, odio cuando mientes.
odio que me hagas reir, encluso más que me hagas llorar.
odio no verte la cara y no tener noticias tuyas.
pero más odio no odiarte ni un poquito, ni un ápice, ni nada.

No hay comentarios:
Publicar un comentario